Después de la euforia por haberse consagrado campeón local, el Rangers de Steven Gerrard sufrió una dura derrota por la Europa League.
Perdieron de local 2-0 contra el Slavia Praga y quedaron afuera por los octavos de final del certamen europeo.
Sin embargo, el resultado no fue el motivo por el que el encuentro dio la vuelta al mundo a tráves de las redes sociales.
Fue precisamente lo que hizo Kemar Roofe pasada la hora de juego en un pelotazo largo que fue a dividir contra Ondrej Kolar, arquero del Slavia Praga.
El jugador del Rangers fue con la pierna en el alto, no le pegó al balón, pero sí atinó a dejarle la suela del botín en la cara del rival.
Fue expulsado con roja directa y era para cadena perpetua. Después de varios minutos de atención dentro de la cancha, Kolar no pudo seguir y pidió el cambio. ¡La patada del año!
