Este domingo, luego de consumar la victoria ante Osasuna el pasado sábado, Barcelona comenzó a cerrar una de las historias más complejas y difíciles de su historia moderna: buscando cicatrizar de forma definitiva la renuncia de Josep María Bartomeu, el club Culé llevó a cabo sus correspondientes elecciones para definir al próximo presidente de la institución.

A la expectativa de conocer al nuevo máximo mandatario del elenco Blaugrana, los candidatos Joan Laporta, Toni Freixa y Victor Font pasaron a primera hora por el Camp Nou para efectuar su voto y ser parte una nueva jornada de elecciones.

Sorprendiendo a más de un aficionado, una de las caras que se hizo presente en el estadio del club fue la de nada más ni nada menos que Lionel Messi: La Pulga, ejerciendo su derecho a voto, optó por expresar su opinión a través de las urnas.

Acompañado por su hijo Thiago y a su vez rodeado por un sinfín de miradas, Messi, centrado en el futuro político del club de sus amores y a la espera de poder definir lo que será de su futuro, hizo historia y fue parte de las elecciones presidenciales del Barcelona por primera vez.