En el año 2013, y, luego de deslumbrar a propios y extraños con la camiseta de Santos, Neymar inició su primera aventura en el viejo continente vistiendo la camiseta de un gigante como Barcelona. Esta transferencia generó un gran revuelo ya que, anteriormente, el astro brasileño había estado en la órbita de Real Madrid. Además, rápidamente, el atacante se integró positivamente y empezó a formar una delantera realmente temible junto a dos cracks como Lionel Messi y Luis Suárez.

Sin embargo, de manera un tanto inesperada, Neymar se marchó de Barcelona a mediados del año 2017. Es que apareció en escena Paris Saint-Germain y pagó los 222 millones de euros de su cláusula de rescisión, convirtiéndose así en la transferencia más cara en toda la historia del fútbol. La idea del jugador, aparentemente, era dejar de estar a la sombra de Messi y pelear por ser el mejor del planeta. Sin embargo, y, a pesar de los goles y los títulos locales, las cosas no fueron como se esperaba.

Giovane Élber, una gloria de Bayern Munich. (Foto: Getty)

Giovane Élber, una gloria de Bayern Munich. (Foto: Getty)

Bajo esa órbita, durante los últimos tiempos, Neymar se mostró muy poco a gusto en el equipo de la capital francesa y se deslizó repetidamente la posibilidad de volver al elenco catalán. Muchos están de acuerdo con esta potencial operación pero otros tantos se muestran reacios. Precisamente, uno que integra este último lote es Giovane Élber, recordado exdelantero brasileño que aseguró que Barcelona no debe abrirle las puertas a su compatriota porque se portó muy mal con la institución.

“Rotundamente no”fue la respuesta de Élber cuando, desde ‘Cadena SER’ le preguntaron si Barcelona debía volver a fichar al brasileño.“Neymar se portó muy mal con el Barcelona. Quiso salir del club pero si lo que quería era ser el mejor del mundo no se podía ir al Paris Saint-Germain. ¿Cómo quieres ser el mejor del mundo jugando en el Paris Saint-Germain?”, comenzó exteriorizando el hombre que rompió redes con la camiseta de Bayern Munich durante seis años, entre 1997 y 2003.

“Para ser el mejor del mundo debes estar en un equipo que aspire a ganar la Champions League, como Real Madrid o Barcelona, no en Paris Saint-Germain, por el amor de Dios”, completó el brasileño, que supo ganar dicho certamen continental en el año 2001 y posteriormente la Copa Intercontinental ante Boca Juniors ese mismo año. Además defendió los colores de Londrina, Milan,Grasshoppers, Stuttgart, Olympique de Lyon, BorussiaMönchengladbach y Cruzeiro.