UEFA sancionó a Manchester City con dos años sin poder disputar competiciones europeas y además le aplicó una multa de 30 millones de euros.

Josep Maria Bartomeu, presidente del Barcelona, apoyó la decisión del ente madre de fútbol europeo.

Sin embargo, las declaraciones del directivo español no cayeron muy bien en Inglaterra. Principalmente, en Pep Guardiola.

El director técnico del Manchester City le respondió a Bartomeu y subrayó que todavía hay que espelar la respuesta de los Ciudadanos.

"Esperen la apelación. Que no hable muy alto porque todo el mundo está envuelto en cosas a veces", disparó.

Por si a Bartomeu le faltaban enemigos, en Inglaterra parece que se ha ganado uno.