En su momento, Lucas Olaza fue uno de los grandes caprichos que Boca finalmente le cumplió a Guillermo Barros Schelotto.

El DT lo tuvo en consideración al punto tal de haber contado con él desde el inicio de los partidos para los dos encuentros disputados ante River por la final de la Copa Libertadores.

Luego de dicha serie, Olaza solo volvió a pisar el verde césped al cotejo siguiente, en lo que la derrota por 2 a 0 vs. Unión de Santa Fe en el marco de la Superliga Argentina.

Posteriormente, Lucas partió de forma imprevista a Europa para pasar a portar los colores del Celta de Vigo de España.

Su arribo al Viejo Continente prometía, pero desde aquel entonces lo que comenzó para el defensor fue verdaderamente un calvario.

Mientras que el club español pelea por no descender en La Liga; Olaza, pese a los cambios de entrenadores, no fue convocado siquiera en una sola oportunidad para aunque sea ir al banco.

Ya pasaron siete encuentros por el certamen local y, por el momento, todo indica que Lucas deberá seguir esperando ansiosamente tener aunque sea una chance de integrar una nómina para algún partido.