Después de muchas idas y vueltas, tanto la Federación Española como La Liga llegaron al acuerdo de que El Clásico entre Barcelona y Real Madrid en el Camp Nou, que había sido postergado, se dispute el 18 de diciembre desde las 20.

Pero esto ha generado malestar en la Casa Blanca, ya que se sienten perjudicados por tener menos descanso que su rival de cara a tan trascendental encuentro.

Al Real Madrid no le ha sentado nada bien que vaya a descansar 29 horas menos que el equipo Blaugrana de cara al clásico. En el fin de semana previo, el Barça jugará en Anoeta el sábado 14 a las 16:00 horas, mientras que el equipo Merengue visitará Mestalla el domingo 15 a las 21:00 horas.

Por lo tanto, el conjunto de Zidane tendrá dos días de entrenamiento y el viaje a Barcelona antes de la disputa del partido. Por su parte, Valverde tendrá tres días para preparar el encuentro.

Los blancos están convencidos de que Tebas favorece de manera intencionada al Barça por el enfrentamiento abierto que tiene la entidad madrileña con La Liga.

El Real Madrid es el único club que se opone públicamente al partido de Miami y ha enviado una dura carta a la FIFA, a petición de la RFEF, mostrando su descontento por la posible celebración del Villarreal-Atlético de Madrid fuera de España.