El Milan tiene mucho por trabajar. Pero todo es más dificil cuando los resultados no acompañan en un proceso para ser protagonista en todos los frentes.

Un comienzo complicado en la Serie A puso dudas en torno al equipo de Gatusso que a pesar de vencer a la Roma en un gran partido, perdió ante le Nápoles y empató con Cagliari.

El Atalanta hizo mucha fuerza en su visita al gran equipo de Italia. El comienzo fue ideal con un golazo de Gonzalo Higuaín. El delantero la agarró de volea y anotó por tercer partido consecutivo con su nueva camiseta.

Pero el partido nunca dejó de ser totalmente parejo. El Papu Gómez amargó la fiesta al comienzo del segundo tiempo pero Bonaventura, sin dudarlo, puso la victoria parcial del Milan nuevamente a los 5 minutos.

Todo indicaba que el partido tendría ese resultado final, pero en el último suspiro Emanuel Rigoni, argentino cedido desde el Zenit de Rusia, empujó el balón ante un rebote del arquero haciendo delirar a sus compañeros e hinchas.