Esta vez no hubo magia en los pies de Harry Kane, que pudo empezar a liquidar la serie de octavos de final de la Champions League ante Juventus, pero que, extrañamente, no estuvo preciso en la definición.

 

Porque el delantero inglés ya había dejado en el camino nada menos que a Buffon con un gran movimiento y cuando solo le faltaba empujar el balón al contacto con la red, mal pisado terminó tirándolo afuera. ¡Raro en él!