Conscientes de que Julen Lopetegui no tiene todavía intenciones de contar con él en el primer equipo y de que sus rendimientos en el filial podrían hacer que otros equipos lo seduzcan ofreciéndole lo que no tiene en el club; la directiva del Real Madrid ha tomado una postura sobreprotectora respecto de Vinicius Jr.

Y dichos cuidados son casi carcelarios si se tiene en cuenta que la última decisión del club es prohibir a la joya tomar contacto con la prensa después de los partidos del Castilla, que están rompiendo récord de audiencia en el canal oficial del club por la sola presencia del brasileño.

Tan despacio quieren llevar a Vinicius en Real Madrid, y tanto temor tienen de que algo atente contra su joya, que incluso ahora que juega para el Castilla se evalúa que solo juegue aquellos encuentros que, a priori, no signifiquen un riesgo para su integridad física.

Además, el club puso a disposición del brasileño un asesor que lo aconseja sobre cómo manejar su dinero, que se ha incrementado considerablemente respecto de los montos que ingresaba en Flamengo.