En el día de su presentación como flamante incorporación de Internacional, de Porto Alegre, Paolo Guerrero vivió una fiesta de bienvenida inolvidable gracias a la pasión de los fanáticos del Colorado.

 

El peruano, que desde el comienzo de la recibida vistió los colores de Inter, se acercó a los hinchas, se fotografió con ellos, les firmó autógrafos y los acompañó tocando el bombo.

 

Además, el Depredador, que utilizará el dorsal 79 (fue el año en que el Colorado se consagró campeón del Brasileirao por última vez), manifestó la alegría que le genera pertenecer a esta institución: "Estoy feliz. Y ahora a devolverlo en el campo de juego".

 

Como no podía ser de otra manera, la torcida enloqueció con la llegada de Paolo y, por eso, dichos fanáticos comenzaron a comprar la camiseta del peruano, habiendo vendido más de 600 durante este miércoles.