Pocas cosas pueden arruinar la apariencia estética de nuestro vehículo como las abolladuras. Estas imperfecciones son de los golpes más comunes que pueden encontrarse en un automóvil.
Afortunadamente, existen muchas formas en que puedes hacerle frente por ti mismo a este problema sin que tengas que gastar de más en un taller de latonería.
Revisa cuidadosamente los daños
Siempre debes estar seguro de entender bien el problema de tu auto. Fuente: Pexels
Lo primero que debes de tener en cuenta a la hora de intentar reparar una abolladura por tu cuenta, es conocer bien de qué se trata el problema antes de poner manos a la obra. Muchas de estas imperfecciones pueden ser solamente pequeños hundimientos o rayones superficiales los cuales no requieren de equipos muy especializados para poder solucionarlos.
Es común que muchas imperfecciones en la pintura y carrocería de los vehículos puedan ser reparados de forma rápida y precisa solamente utilizando herramientas que todos tenemos en nuestra casa, pero para esto es necesario saber a qué nos estamos enfrentando y de qué manera podemos abordar el problema.
Una de las principales ventajas delas pequeñas abolladuras, es que son fáciles de detectar a simple vista y por lo tanto no se requiere de ningún tipo de maquinaria o herramienta especializada para identificarla.
Algo que también se debe tener presente, es que no debemos apresurarnos a sacar conclusiones. Es necesario tomarnos nuestro tiempo e intentar ser lo más meticulosos posible a la hora de diagnosticar por nuestra cuenta, de lo contrario, siempre existirá la posibilidad de que terminemos generando un problema que puede resultarnos mucho más costoso.
¿Cómo reparar las abolladuras usando calor?
Si te has tomado el tiempo de investigar por tu cuenta, es muy probable que te hayas topado con muchas fuentes e incluso testimonios de personas las cuales aseguran que es posible reparar abolladuras usando altas temperaturas.
Pues basándonos en el principio científico que existe detrás de esto, la idea no es tan descabellada si se piensa con detenimiento.
Usar calor es una buena forma de hacer que las láminas de metal de la que está conformada la carrocería del auto se expandan y produzcan un efecto que hará que la pieza regrese a su estado original.
El agua caliente es una buena forma de eliminar cualquier desperfecto superficial de tu auto sin tener que recurrir a herramientas o productos que pueden llegar a dejar marcas sobre la pintura.
Reparar la carrocería por medio de la succión
Otra forma efectiva y muy fácil de reparar al instante las abolladuras de la carrocería de tu vehículo es mediante la succión.
En muchos casos es posible reparar con facilidad desperfectos superficiales utilizando una herramienta tan común como un desatascador, ya que esta herramienta es capaz de generar un vacío que mejora la adhesión y por lo tanto, te da la posibilidad arreglar la deformación aplicando solo la fuerza necesaria.
De hecho, actualmente es más común conseguir en tiendas de autopartes ventosas profesionales,las cuales son realmente muy fáciles de usar y además, están disponibles a precios que se ajustan a cualquier presupuesto.
Una de las ventajas más evidentes de la succión para reparar abolladuras, es el hecho de que este método te brinda la posibilidad de reparar cualquier desperfecto en minutos sin el temor que la cantidad de fuerza que estás aplicando sobre la pieza pueda generar un daño permanente.
Es buena idea que antes de reparar una abolladura mediante succión, enjuagues el área con abundante agua caliente para que de esta forma el metal se ablande un poco y puedas arreglar el desperfecto más fácilmente.
La combinación de altas temperaturas y herramientas que generan vacío son una forma ingeniosa, y sobre todo bastante efectiva para reparar cualquier tipo de deformación sin necesidad de tener que recurrir a un taller especializado.
¿Cómo reparar las abolladuras profundas?
Puedes optar por pintar de nuevo tu automóvil en caso tener abolladuras. Fuente: Unsplash
Muchas veces las abolladuras presentes en nuestro vehículo pueden llegar a producir daños bastantes severos que llegan a representar un problema que va mucho más allá de la parte estética.
Es en estas ocasiones cuando puede resultar una buena idea llevar nuestro auto a un taller profesional, sin embargo, muchos de los productos que usan los profesionales es posible poder conseguirlo en las tiendas.
Si posees algunos conocimientos de mecánica y no tienes problema en ensuciarte un poco las manos, debes saber que las tiendas de autopartes están repletas de productos y herramientas con las que podrás reparar sin problemas cualquier tipo de abolladura.
Una vez hayas precisado qué tan grave resulta el problema, lo que resta es buscar el producto adecuado para tratar la abolladura y tomarte el tiempo que necesites para que tu vehículo vuelva a quedar como antes.
A diferencia de lo que muchos piensan, la mecánica es una actividad que requiere de delicadeza, precisión y mucha minuciosidad; sobre todo si consideramos que el más mínimo error puede llegar a convertirse en una reparación muy costosa.
Siempre es buena idea que antes de reparar cualquier abolladura por tu cuenta, te tomes algunos minutos para leer el manual de tu auto.
Aplicar pintura
Cuando hablamos de formas para eliminar abolladuras de la carrocería, el pintar nuevamente el área dañada siempre será la opción más evidente.
Si bien esto puede ser la forma más directa de lidiar con las abolladuras, sobre todo cuando tienes a mano las herramientas adecuadas, es importante que estés muy consciente que es un proceso que toma años perfeccionarse.
Sin embargo, existen consejos que siempre te serán de mucha ayuda para realizar un mejor trabajo. Antes de aplicar la masilla sobre el desperfecto, es importante que te asegures de lijar bien la superficie para que de esta forma puedas deshacerte de cualquier irregularidad y el barnizado tenga un acabado mucho más parejo.
Por último, recuerda que la capa de masilla que apliques para rellenar la abolladura sea lo más fina posible, de esta forma el barnizado lucirá más prolijo y habrás realizado un trabajo de restauración que durará años sin que nadie siquiera pueda notar en donde estaba la imperfección.
