Pura vida: la historia de Costa Rica en los mundiales

Con su cotidiana frase, la "Pura vida" se escuchó más fuerte que nunca en el último mundial. No obstante, a la Selección de Costa Rica le costó casi medio siglo consolidarse como hoy. 

ITALIA '90. Óscar Ramírez y Róger Flores ante Checoslovaquia.

En Italia 1990, un mes repleto de sorpresas, la Sele jugó su primera Copa del Mundo, después de no poder clasificar desde Suecia '58 a México '86. Había un plantel lleno de históricos, donde portaba la Diez Óscar "Machillo" Ramírez, el hoy seleccionador del conjunto nacional. 

Le ganó a Escocia, perdió por la mínima contra Brasil y venció a Suecia para clasificar segundo del Grupo C. En octavos de final, Checoslovaquia le haría cuatro y quedaría afuera en octavos de final. Igualmente, los ticos habían superado las expectativas. 

ALEMANIA 2006. Wanchope supera a Friedrich y Lehamann en el partido inaugural (Foto: Getty).

Sin embargo, para Estados Unidos '94 y Francia '98 no pudieron clasificar. Volvieron en Corea-Japón del 2002: le ganaron a China, empataron con Turquía pero la goleada 5-2 encajada con Brasil los dejaría afuera por diferencia de gol. 

Clasificaron otra vez para Alemania 2006, pero la suerte no sería la misma: perdieron 4-2 con Alemania en el partido inaugural, 3-0 con Ecuador y 2-1 ante Polonia. El eterno Paulo Wanchope anotó dos en el Allianz Arena ante los locales. Christian Bolaños y Michael Umaña, quienes hoy jugarán su tercer mundial, estuvieron con apenas 17 y 19 años, respectivamente.

No ir a Sudáfrica 2010, tras perder en el repechaje con Uruguay, fue un golpe muy duro. Pero volvieron y en Brasil 2014 jugaron el mejor mundial de su historia. 

Cayeron en el Grupo de la Muerte, se pusieron la capucha y agarraron la hoz. Le hicieron tres a la Uruguay experta en defender, vencieron al tetracampeón del mundo Italia y eliminaron a Inglaterra con un empate. Superaron a Grecia por penales y se metieron entre los mejores ocho del mundo. Contra Holanda, Louis van Gaal metió a la cancha a Tim Krul y la ilusión se acabó. Pero el grito de "Pura vida" se hizo escuchar en todo el mundo.