La mexicana Brianda Cruz no tenía una parada nada fácil en su debut en los Juegos Olímpicos de Tokio, pues enfrentaba en la división de peso wélter a una Oshae Jones en la que los Estados Unidos tienen depositadas sus mayores aspiraciones de conseguir una medalla dorada en el boxeo.
Tras un primer round que se le hizo muy cuesta arriba, en la que se vio superada por el estilo de la estadounidense, Cruz sacó a relucir sin embargo una versión muy mejorada de su boxeo en el segundo asalto y logró aterrizar buenos derechazos para complicarle la decisión a los jueces más de lo que lo habían tenido en el inicio de la pelea.
La mexicana tuvo incluso su ronda más convincente en el cierre, yendo a buscar a Jones por saberse en desventaja y conectando con tal eficacia que llevó a que cuatro de los cinco jueces la dieran como ganadora en el round final, aunque no para ganar una pelea en la que salió perdiendo en fallo dividido de 2-3.
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El boxeo mexicano se quedó así sin sus dos representantes femeninas en los Juegos Olímpicos de Tokio, pues unas horas antesEsmeralda Falcón había caído ante la italiana Rebecca Nicoli con fallo de 4-1 en un combate que se disputó en la división de peso ligero.
Sí queda todavía un crédito para que México vaya en busca de una medalla en la disciplina debido a que mañana el que estará subiendo al ring es Rogelio Romero, para hacer su debut en la división de peso semipesado enfrentando al croata Luka Plantic.