Una de las rivalidades más importantes a nivel personal en el futbol mexicano es la que arrastran Hugo Sánchez y Ricardo La Volpe, la cual inició hacia finales de la década de los 70 y continuó con varios episodios a lo largo del tiempo, tanto dentro como fuera de la cancha, como también en los medios de comunicación.
Uno de los capítulos más recordados es la bronca que protagonizaron en el vestidor del Atlante durante la pretemporada de la campaña 1995-1996 en Austria, la cual fue presenciada por el entonces veterano mediocampista Ruben Omar Romano, quien enentrevista fue durísimo con el Pentapichichi, comenzando por recordar que lo “salvó” de una golpiza de parte del Bigotón.
ver también
Faitelson pide sacar al Tri del Azteca y mudarse a otros dos estadios
“Yo me topé con él y saluda como si nada pero despuéstira con todo de espaldas. Yo creo que pasa porque me identifica con lo de La Volpe, pero cuando fue lo de La Volpe fui el único que lo apoyó, el único que lo salvó de algo fuerte, se lo saqué yo de encima. Lo saqué yo, sino lo mata, de un trompazo le saca la cabeza“, relató el argentino al medio Social Sports con los periodistas José Luis Gutiérrez, Gerardo Melín y Paco Arredondo.
“Como jugador espectacular, como persona…”
En cuanto a su relación personal con Hugol, Romano le dedicó fuertes palabras al afirmar que se trata de una mala persona, resaltando que siempre se portó muy bien con él, pero recibió malos tratos de su parte. “Hay que separar lo que fue como futbolista, que fue algo espectacular, un nueve que va a quedar siempre marcado. Pero después, la otra parte, deja mucho que desear”, disparó.
“Conmigo se agarró por el solo hecho de ser argentino y haber trabajado con La Volpe, porque nunca tuve problema con él enrealidad. Es más, jugamos juntos, después fui auxiliar y me porté muy bien con él, hasta me invitó a la boda y no fui por respeto a que no invitó a ninguno del cuerpo técnico y yo era auxiliar“.
Y continuó con los dardos envenenados: “Una vez que fui a ESPN supuestamente iba a estar todo el programa, y a los 35 minutos me tengo que ir. Resulta que el tipo no quiso entrar al set porque estaba yo en el programa. Cosas ilógicas de un tipo que primero te saluda y después de atrás te hace estas cosas”.
