David Beckham es uno de los futbolistas que más dinero ha hecho a su largo de su carrera. Y si bien jugó en Real Madrid, PSG, LA Galaxy y Manchester United, mucho de su capital se lo ganó como modelo y estrella en Estados Unidos. Es por ello que hoy se lo considera una estrella y que puede darse lujos de semejante nivel.

Y por si no queda claro, nos referimos no sólo a lujos de comprarse vehículos que cuestan cientos de miles de dólares, sino de personalizarlos a su antojo. Así ha hecho con su Rolls-Royce Phantom Drophead.

Este Rolls-Royce, valuado en 500,000 dólares, es una de las piezas más destacadas del fabricante, pero Beckham ha decidido darle su toque. Con ello, podemos apreciar que cuenta con algunos detalles personalizados.

Beckham personalizó su Rolls-Royce Phantom

El descapotable de Beckham cuenta con ciertas modificaciones con respecto al vehículo en su forma original. Lo más destacado lo podemos apreciar en las llantas forjadas especialmente para este Rolls-Royce. Son de 24′, pintadas de color negro y firmadas por Savini.

Así mismo, dentro de lo que es la tapicería, podemos apreciar el número 23 bordado en los respaldos de los asientos. Esto hace referencia al icónico número que Beckham utilizaba como jugador de fútbol.

Cabe destacar, además, que David forma parte de los accionarios mayoritarios de Lunaz Design. Esta empresa se dedica a transformar vehículos clásicos y de alta gama y potenciarlos con motores eléctricos. Con un 10% de las acciones de la firma, Beckham también ha tenido la posibilidad de hacerle este retoque a su Rolls-Royce, pero esto no nos consta que haya sucedido.

Por lo pronto, un Rolls-Royce Phantom Drophead como el que David posee cuenta con un potente motor V12 de 6.5 litros, uno de los motores más grandes en vehículos que no son todo terreno. La velocidad máxima de este coche tope de gama es de 240 km/h.

David Beckham es una de las personalidades más grandes que ha dado el fútbol en toda su historia, y hoy como fundador del Inter Miami CF de la MLS lo demuestra tanto dentro como fuera del campo.