La segunda edición de la UEFA Nations League trae semifinales que tranquilamente podríamos ver en una Copa del Mundo. Francia y Bélgica dan los últimos pasos hacía un choque cargado de figuras del primer nivel europeo. Con Deschamps y Martínez como los arquitectos de dos equipos que han quedado en la historia de sus países,. Estos serán algunos de los duelos a tener en cuenta mañana en Milán.

Sin dudas habrá cuentas pendientes, pues ese gol e Umtiti en las semis de Rusia marcó un antes y un después para ambos entrenadores. Francia llega golpeada, sin Kanté para la batalla del medio campo y con un Mbappé que es noticia en toda Europa por sus declaraciones. Bélgica por su parte, tiene una deuda consigo mismo y esa generación a la que queda hasta Qatar para tocar el cielo.

 

Derbi de Manchester y las batallas de mañana

Como si se tratase de un United vs. City, Paul Pogba y Kevin De Bruyne tendrán su propio duelo cuando tengan que manejar los ritmos de un partido marcado por la intensidad y los contragolpes. Si bien ninguno coge todavía el ritmo deseado en la Premier, sus selecciones siempre han sido testigos de su mejor versión en las grandes noches. Quien se haga con la pelota en Milan, le sumará varios puntos a su equipo en la carrera a la final del domingo.

Resulta imposible no mirar hacía Kylian Mbappé y Romelu Lukaku como ese choque de delanteros llamados a marcar la diferencia en la Nations League. El delantero del PSG fue la cara de la derrota en la Euro con su penalti fallado ante Suiza, mientras el 9 del Chelsea necesita quitarse ese slogan de goleador en partidos de baja índole. Los ojos del mundo mirarán a sus botas.

Para que puedan hacer la diferencia, tendrán que vencer la resistencia de dos de los mejores porteros en el fútbol de selecciones. Thibaut Courtouis y Hugo Lloris volarán como nunca mañana en San Siro ante continuos asedios de volante y atacantes francófonos. Los errores no están permitidos ante tanto material ofensivo.

Por último pero no menos importante, Deschamps y Martínez también tienen su partido. El español estuvo en las semis de Rusia y vive sus últimos meses como entrenador de una Bélgica a la que puso en los primeros planos de este deporte. Ante un francés que en caso de fallar pondría en serias dudas su continuidad, Roberto desea que por primera vez en la historia los Diablos Rojos sean campeones.