Dentro de las alternativas que ha puesto sobre la mesa laNBApara reanudar la temporada 2019-2020 de la competición, una de las ideas que va tomando fuerza es la de llevar la Liga a un lugar que funcione como “burbuja”, para recibir a jugadores, entrenadores, trabajadores y medios, de esa forma seguir adelante.
Sin embargo, en muchos de los deportistas, la idea de encerrarse en Las Vegas o Disney World, en Orlando, no es el todo agradable, y así lo reconoció la directora ejecutivade la Asociación de Jugadores de Básquetbol (NBPA),Michelle Roberts, en conversación conESPN, quien admitió que la idea, incluso, llegó a asustarlos.
Michelle Roberts, directora ejecutiva de NBPA (Foto: Getty)
“Cuando se lanzó por primera vez, hubo cierta consternación.Unaburbuja estrictadonde los jugadores están separados de sus familias, y solo van y vienen de prácticas y juegos a un hotel, puede parecer atractivo inicialmente; peropara hacerla cumplir, todos los que están dentro probablemente tengan que someterse a algún nivel de vigilancia. Entonces, ¿vamos a armar guardias alrededor del hotel? Eso me suena a encarcelamiento“, señaló la directiva gremial.
En ese sentido, Roberts agregó “¿qué pasa si un miembro del equipo fue a buscar una porción de pizza y se infectó?¿Qué pasa si un miembro de la familia asintomático u otra persona importante visita y propaga el virus?Entonces los jugadores dijeron: ‘Bueno, no sé si vale la pena estar lejos de mi familia por tanto tiempo’.Podríamos hacer todo eso, y luego, ¿qué sucede cuando uno o dos o 10 jugadores dan positivo después de ese aislamiento de 28 días? ¿Lo cerramos?”.
Finalmente, para la ejecutiva esto ya no es una forma de superar el virus, sino más bien una forma de vivir con él, pues “este es un mundo con el virus, ytenemos que encontrar una manera de trabajar, jugar y vivir en un mundo con el virus.Las preguntas ahora han evolucionado desde ‘¿Vamos a jugar de nuevo?’a: ‘Si jugamos, ¿cómo serán los riesgos?'”.