Desde su llegada a la NBA, Kyle Kuzma ha tenido que demostrar que es digno de una oportunidad y que puede convertirse en una estrella de la liga a pesar de no contar con mucha publicidad.
Kuzma se convirtió en uno de los mejores jugadores de su clase del Draft e incluso el único de los jóvenes de los Lakers que sobrevivió a los cambios de vestuario, y cada día se ve más confiado en su juego.
Asimismo, explicó recientemente que ni siquiera el hecho de jugar al lado de LeBron James puede afectar su confianza, pues, a pesar de ser uno de sus ídolos, considera que hay cosas realmente más importantes en la vida:
“Solo puedo hablar por mí, pero he pasado por mucho y he podido con todo. Mi infancia fue dura, salir de Flint (Michigan). Mucha gente no logra salir, es un sitio súper violento. Es difícil llegar a los 21 si eres de donde vengo, pero yo salí. Eso es lo más difícil que un chico tiene que vivir. (….) Además, tuve varios ídolos, Kobe, Carmelo, LeBron, Michael Jordan, Shaquille O’Neal”, declaró Kuzma.
Ciertamente, esa confianza en sí mismo y las ganas de trabajar incansablemente han dado dividendos para el joven de los Lakers, que se convirtió en una de las figuras principales de Puma recientemente.
Además, su infancia difícil y ética de trabajo lo han hecho desarrollar una importante química con LeBron James, y será él junto con Anthony Davis el encargado de devolverle la gloria a los Lakers una vez el Rey decida retirarse