Memphis Grizzlies está teniendo una reanudación de NBA muy complicada. En el ámbito deportivo, nunca han podido desplegar las alas como en la temporada regular y han caído ante tres rivales directos en la lucha por la clasificación a postemporada. El primer golpe lo dio Portland Trail Blazers, luego San Antonio Spurs y, por último, el juego que no se podía perder: New Orleans Pelicans. 

 

Cuando parecía que nada podía salir peor en Orlando, lo imposible se transformó en realidad: perderán a uno de los jugadores más importantes de todo el plantel y el que supo sacar la cara en los peores momentos de la reanudación, incluso por encima de un Ja Morant que más no puede hacer repartiendo juegos para todos sus costados. 

Jaren Jackson Jr. sufrió la rotura del menisco de su rodilla y, de acuerdo a la información de Adrian Wojnarowski, se perderá el resto de la temporada. Es normal, ya que es una lesión que requiere algunos de meses de recuperación, pero lo positivo de la misma es que no haya sufrido la rotura de los ligamentos cruzados, cuya recuperación es mucha más larga. 

En sus últimos tres juegos, Jackson promedió 25,3 puntos por ecuentro, demostrando que está listo para el siguiente paso en la NBA. No obstante, una lesión de estas características será importante que no deje secuelas negativas en el joven jugador de 20 años. 

 

 

No es la primera lesión para el interno, ya que, en febrero del año pasado en su temporada de rookie, sufrió una lesión en el cuádriceps derecho, por el que se perdió más de 20 juegos y también acabando con su primera campaña.