Mauricio Macri, presidente argentino, confirmó en su cuenta de Twitter que le pedirá a la ministra de seguridad Patricia Bullrich que las finales entre Boca y River se jueguen con público visitante.
La Copa Libertadores enfrentará por primera vez a los dos clubes más grandes de la Argentina en una serie que, al parecer, puede ser aun más épica.
“Le pedí a la ministra de seguridad que trabaje con la Ciudad de Buenos Aires para que el público visitante pueda ir”, escribió Macri, quien presidió a Boca entre 1995 y 2007.
El público visitante no puede seguir a su equipo en la Capital Federal desde 2013 y los antecedentes gubernamentales no indican mucha confianza en el regreso de los mismos.
Sin ir más lejos, ayer, Newell’sy Rosario Central disputaron uno de los clásicos más importantes de su historia a puertas cerradas y en Sarandí, muy lejos de casa.
Si bienMartín Ocampo,ministro de seguridad de la Ciudad de Buenos Aires, había descartado esta posibilidad minutos después de que el mandatario publicara el tuit, Macri salió al aire enLa Redpara reafirmar la información.
“Hoy me levanté y dije ‘vamos a hacer que esta final tenga el condimento del fútbol argentino’.Acordamos que vamos a permitir que haya público visitante. Es una decisión que hemos tomado con el Gobierno Nacional y el Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires”,decretó el presidente.