Lo que parecía imposible finalmente sucedió: alguien le dio una cucharada de su propia medicina a los poderosos Golden State Warriors en los playoffs, sellando una increíble e histórica remontada en la primera ronda.

Tras ponerse adelante por hasta 31 puntos, los Warriors terminaron siendo vapuleados por una férrea defensiva y un vendaval ofensivo de unos Clippers que les anotaron 85 puntos en la segunda mitad.

De esta forma, sellaron la remontada más importante en la historia de los playoffs al imponerse 135-131 en el Oracle Arena, algo que a los jugadores de los Warriors no les gustó para nada.

"Simplemente no merecimos ganar", declaró el escolta estrella Klay Thompson tras la derrota. Sin embargo, para Andrew Bogut, esta molestia podría ser algo positivo a la larga para los campeones defensores:

"El vestuario es una mi#rda ahora, pero eso es algo verdaderamente positivo para nosotros. Estamos realmente molestos al respecto".

Steve Kerr, entrenador de los Warriors, fue incluso más sobrio y contundente en sus declaraciones post partido, no sin antes reconocer el mérito de los dirigidos por Doc Rivers:

"Nos dieron exactamente lo que nos merecíamos. Los Clippers fueron excelenltes. Ejecutaron, se mantuvieron hambrientos, se conectaron, estuvieron juntos".

Por si esto fuera poco, los Warriors sufrieron una durísima pérdida pocos minutos después del inicio del partido,  pues DeMarcus Cousins debió abandonar la duela por lesión y se presume que podría perderse toda la postemporada. ¿Podrán sobreponerse a este duro golpe?