Mucho se ha hablado de la pobre actuación de los Lakers en toda la campaña y si el equipo piensa seguir arriesgando la salud de LeBron James por una temporada perdida.

Analistas como Paul Pierce, Stephen A Smith y Reggie Miller han asegurado que James debería simplemente sentarse el resto de la campaña, considerando que las posibilidades de llegar a playoffs son mínimas y el veterano ya tiene 34 años.

Sin embargo, el Rey no quiere escuchar nada de esto y ha decidido mantenerse firme en la lucha por llevar a su equipo a la postemporada.

En este sentido, a menos que se lesione, James continuará jugando noche a noche para los angelinos en un intento desesperado por salvar una campaña para el olvido.

James sabe muy bien que, de decidir sentarse, su legado quedaría empañado de por vida, mientras que si logra que los Lakers se cuelen en los playoffs se consagrará como una leyenda.