Los Oakland Raiders fueron una decepción y un desastre la campaña pasada, en gran parte porque el equipo traspasó a sus jugadores más talentosos en ambos costados del emparrillado.

Es por eso que, ahora que cuentan con suficientes selecciones de primera vuelta, los Raiders buscarán volver a ser competitivos.

En este sentido, apareció el interés del equipo en conseguir a Antonio Brown, controversial receptor abierto de los Pittsburgh Steelers que ya no quiere ser parte de la franquicia.

Para Derek Carr, mariscal de campo de los Raiders, esto sería un paso en la dirección adecuada, e incluso llegó a asegurar que sus compañeros lo recibirían "con los brazos abiertos".

"A mi no me gusta esta parte del fútbol, pero si logran hacer un negocio, sé que los muchachos recibirían a Antonio con los brazos abiertos".

Irónicamente, existe el rumor de que los Raiders podrían intentar traspasar a Carr durante la noche del Draft tras una temporada con niveles muy por debajo de lo esperado.