La más reciente polémica que ha dividido las aguas entre los jugadores de laNBA, tiene relación con el regreso a la actividad a partir del próximo 30 de junio, donde mientras un grupo comandado porKyrie Irvinginsisten en que no están las condiciones para volver a jugar, otros del lado deLeBron Jamesquieren regresar a toda costa a las canchas.
A falta de que exista una decisión definitiva entre los principales protagonistas del juego, surge de inmediato la pregunta entre millones de fanáticos del básquetbol:¿Qué pasaría si es que finalmente no se reanuda la NBA?La respuesta parece clara, irá en directo perjuicio de los deportistas y en beneficio de las franquicias.
Lo anterior porque el Comisionado Adam Silver, en caso de no haber acuerdo,puede activar la causa de fuerza mayor para finalizar la temporada, en este caso la pandemia del Coronavirus,lo que provocaríael rompimiento del actual contrato colectivoentre la Liga y los jugadores.
No conforme con esto, el siguiente paso sería elcierre patronal, es decir, el temidolockout, lo que obligaría afranquicias y sindicatos a la negociación de un nuevo convenio, el cual producto de las millonarías pérdidas sufridas por la suspensión de la competencia, sería completamente perjudicial para los jugadores, en un hecho que no ocurre desde el 2011.
Así las cosas, deberán pensando más de dos veces los jugadores antes de tomar una decisión que podría provocar un claro daño para sus cuentas corrientes, sin olvidar el aspecto deportivo.
