En el segundo duelo estelar del reinicio de la NBA, Houston Rockets y Dallas Mavericks se enfrentaron en uno de los juegos más llamativos de la reanudación de la temporada en la ‘burbuja’ de Orlando. Pasaron pocos minutos y la primera gran curiosidad llegó al encuentro.

 

Con la confianza a pleno, Russell Westbrook encaró en uno contra uno a Seth Curry: para aquí, y para allá. El balón no se dejó mover y con un giro Russ sacó a pasear al base de los Mavericks, no sin antes llevarse un contacto. Falta y dos puntos adentro.

La burla llegó después del cobro de uno de los árbitros. En una actitud de soberbia para muchos y de humor para otros, Westbrook hizo el gesto de estar cargando un bebé después de la jugada. ¿Se habrá referido a qué le ganó el duelo al menor de la familia Curry?