Los Golden State Warriors han tenido muchos problemas a la ofensiva esta temporada, y, a pesar de que todos esperbaan una explosión de puntos de Stephen Curry, el armador aún ha quedado en deuda tras tres compromisos.
En este sentido, a Kerr le preguntaron por qué no utilizar a Curry de la misma forma que Mike D’Antoni y los Houston Rockets utilizaron a James Harden, de manera que controle todo el flujo de la ofensiva y anote una gran cantidad de puntos.
Kerr, sin embargo, no estuvo de acuerdo con esta propuesta, pues no considera que pueda rodear a Curry con jugadores de las mismas características que tiene Harden en Houston, y podría ser muy desgastante para Steph.
“Podríamos convertirlo en James Harden y darle la pelota en cada jugada, pero eso es muy difícil de hacer. Tienes que construir un equipo para eso, y no creo que la respuesta sea usar un montón de pantallas altas. Realmente no tenemos el personal para eso. No hay el mismo espacio, y ese tipo de baloncesto te desgasta, especialmente a un tipo del peso de Steph. No creo que tenga sentido desde su punto de vista”, declaró Kerr.
Curry no tiene la misma facilidad para absorber contacto que tiene un jugador mucho más alto y fuerte como Hardne, y, si bien tiene la misma capacidad anotadora, hace mucho más daño jugando sin la pelota que comandando la ofensiva en media cancha.
Harden y Curry son ambos jugadores de élite en estilos diferentes y compararlos podría ser nocivo y contraproducente para los Warriors, que aún tienen mucho trabajo pendiente para revertir su mal inicio de temporada.
