Los comentarios que mantuvo Drew Brees este último miércoles no fueron bien tomados por absolutamente nadie. De hecho, además de los comentarios de los jugadores NFL de otros equipos, algunos de sus propios colegas de New Orleans Saints repudiaron sus dichos.  

 

"Nunca estaré de acuerdo con nadie que no respete la bandera de los Estados Unidos de América o de nuestro país", opinó el quarterback de 41 años cuando fue consultado por aquellos jugadores que deciden hacer ese gesto en un grito contra el racismo. Claro está, esto no fue bien tomado. 

 

El primero en criticarlo fue, justamente, su compañero de equipo Michael Thomas, con quien forma una de las mejores duplas de toda la liga. En una catarata de tweet, Thomas Retwitteó con un emoji de asco uno que decía: “¿Cómo puede alguien ver cómo asesinan a George Floyd y su primera respuesta cuando se le pregunta al respecto es respetar la bandera?”. 

“Está más que perdido. Le garantizo que había hombres negros peleando junto a su abuelo, pero esto no parece ser sobre eso. Esa conversación incómoda que estás tratando de evitar al inyectar a los militares en una conversación sobre brutalidad e igualdad es parte del problema”, comentó Richard Sherman, esquinero de los 49ers, en relación a que Brees puso de ejemplo que sus abuelos lucharon en guerra por la bandera. 

Por último, además de las palabras de LeBron James, otro compañero de equipo se volvió a sumar en su contra. Malcolm Jenkins, en una publicación de 4 minutos en Instagram, sentenció: “Él es parte del problema”. 

 

 

Sin dudas, Brees deberá aclarar, si esto es posible, sus declaraciones. De lo contrario, podrá tener serios problemas no sólo desde sus compañeros o la NFL, sino desde la perspectiva social de Estados Unidos.