Se tratará del primer compromiso que Lionel Messi jugará en condición de visitante desde que es integrante del Club Internacional de Fútbol Miami. Por lo que la situación que se vivió en lo que fue la llegada del plantel que comanda Gerardo Martino a Dallas, ciudad en la que disputará su encuentro por los Octavos de Final de la Leagues Cup 2023, fue totalmente nueva.
Todos los partidos de Messi en Inter Miami se pueden ver a través de Apple TV
Hasta entonces se veía cierto desborde, no solo en los partidos sino también en la ciudad del sureste de Florida, cada vez que el argentino acudía a lugares de la vida cotidiana como un supermercado o un restaurante. Pero, por suerte, nada fuera de lo normal o de lo que hubiese que lamentarse. Solamente la euforia del clamor popular que suscita en las masas de todas partes del planeta el mejor jugador del mundo.
No obstante, lo ocurrido en Dallas ya escaló a otro nivel en comparación a lo que se había percibido hasta entonces, con una secuencia en la que, a simple vista por lo que se observó en el video que se viralizó en las redes sociales, no se apreciaba ninguna señal de amenaza para la integridad física de Lionel Messi y/o de algún otro miembro de la delegación del Inter Miami.
En concreto, un aficionado como cualquier otro intentó acercarse lo más posible al autobús del que estaba descendiendo el plantel del rosinegro, en principio, con motivo de conseguir la firma de Leo, pues sostenía una camiseta de la Selección Argentina y un fibrón. ¿Qué otra intención tendría con esos objetos en sus manos?
Sin embargo, cuatro efectivos policiales lo tomaron por la fuerza, lo inmovilizaron y lo esposaron. En primera instancia, una actitud un tanto desmedida, más allá de que las fuerzas de seguridad deben mostrar cierta rigurosidad para generar autocontrol en los aficionados de cada una de las ciudades que Messi deberá visitar tanto por la Leagues Cup como por la MLS. Igual, el castigo se advierte demasiado excesivo por el solo hecho de querer un autógrafo.