Boca tuvo esa noche de calma que venía necesitando gracias a la goleada sobre Monagas en La Bombonera que le permitió asegurar, en el cierre de la fase de grupos, acceder como uno de los mejores primeros a los cuartos de final de la Copa Libertadores.

Jorge Almirón tomó de todos modos la decisión que el plantel se quedara concentrado para mantener la cabeza puesta en el que será su próximo compromiso ante Sarmiento, por una Liga Profesional en la que viene de quedar muy en deuda saliendo goleado en su visita a Godoy Cruz de Mendoza.

Pero el buen clima que generó la noche de Copa se rompió de golpe cuando sobre el mediodía de este viernes se supo que Marcos Rojo ha tenido que volver a realizarse estudios médicos por una molestia que venía sintiendo en los últimos días, respecto a la cual se espera que Boca de un parte médico en las próximas horas.

Dichos estudios confirmaron que el ex jugador de la Selección Argentina sufrió un desgarro en el gemelo derecho, por lo que estará al menos 3 semanas más fuera de las canchas. Se trata de la quinta lesión muscular que sufre en la temporada, incluida la rotura de ligamentos cruzados.

Cabe destacar que ya sobre el fin de semana el defensor se perfilaba para ser titular en el duelo ante Monagas, aunque por haber tenido que entrenarse diferenciado en la semana, producto de esa dolencia que ahora lo llevó a hacerse estudios, Almirón terminó por descartarlo.

El hecho de que el regreso de Marcos Rojo a jugar con continuidad en el Xeneize continúe dilatándose sin dudas deberá ser un llamado de atención en relación a las necesidades del equipo en el mercado de fichajes. Se sabe que tanto Almirón como Juan Román Riquelme lo consideran una garantía dentro del campo. El problema es todo el tiempo que lleva afuera. Y los días pasan…