Se terminó uno de los eventos más icónicos de la historia de Boca. Con un gran despliegue en La Bombonera, Juan Román Riquelme le dijo adiós a su etapa como futbolista ante 50 mil personas y cientos de invitados especiales que formaron parte de una jornada inolvidable, entre ellos Lionel Messi, Carlos Bianchi y muchísimos más.
Finalizado el encuentro, el actual vicepresidente del Xeneize se subió al escenario y tomó el micrófono para hablarle a todos los espectadores que ansiaban por la palabra oficial de JR10. Uno a uno fue reconociendo a sus entrenadores José Pékerman, Coco Basile y Carlos Bianchi con un emotivo discurso, pero el mayor sacudón emocional se dio segundos más tarde.
Como si se tratase de una devolución histórica, Román recreó la escena en donde Maradona se quitaba su camiseta en su propia despedida para mostrar la casaca de Riquelme que tenía puesta por debajo y lució la 10 de Diego que tenía preparada de antemano. Entre lágrimas, la gente cantó por Pelusa a poco menos de tres años de su fallecimiento.
“Soñaba con comprarle la casa a mi mamá. Ustedes me trataron de maravillas, del primer partido al último, eso fue maravilloso. Fui un afortunado. Me tocó jugar con el más grande que yo vi de chico, que fue Maradona“, expresó Riquelme en su oración. Un momento que ningún hincha de Boca olvidará jamás, unificando a dos de los mayores ídolos del club en una sola imagen y con el dolor que conlleva no tener a Diego entre nosotros. Para un cuadro.