El mundo fútbol se paralizó este domingo cuando, a los 16 minutos del primer tiempo del partido entre Inter de Milán y Fiorentina, el futbolista Edoardo Bove sufrió una descompensación y requirió inmediata atención médica.
Los primeros en asistirlo fueron sus propios compañeros de equipo, y rápidamente el cuerpo médico de Fiorentina llegó para auxiliarlo. El árbitro Daniele Doveri decidió suspender el encuentro mientras las asistencias y la ambulancia ingresaron para trasladar al jugador al centro médico más cercano.
Actualización: Fiorentina publicó el parte médico
“El futbolista, rescatado en el terreno de juego tras perder el conocimiento durante el partido Fiorentina vs. Inter, se encuentra actualmente bajo sedación farmacológica y hospitalizado en cuidados intensivos”.
“Bove llegó hemodinámicamente estable a urgencias y las primeras pruebas cardiológicas y neurológicas realizadas descartaron daños agudos en el sistema nervioso central y el sistema cardiorrespiratorio. Será reevaluado en las próximas 24 horas.”
Minutos antes, Sky Sports Italia había reportado una mejora en el estado de Edoardo Bove, que ya “respira de forma autónoma“, es decir, por sus propios medios, y fue que habías sido trasladado al Hospital Careggi acompañado de los directivos del club.
La descompensación de Edoardo Bove provocó la suspensión del partido
Así como los médicos actuaron rápidamente, también lo hicieron los futbolistas de ambos equipos y el cuerpo técnico de Fiorentina, quienes armaron una barrera humana para evitar que cámaras de los espectadores y de la transmisión tomen capturas del futbolista en un estado sumamente delicado, mientras los médicos trabajaban para auxiliarlo, hasta que pudieron subirlo al móvil médico.
El partido se dio por suspendido y se postergó para una nueva fecha futura, aún a confirmar.
