El automovilismo argentino vive su mejor momento desde su época dorada. Una revolución comienza a derramar sus efectos sobre los nuevos talentos. El nuevo caso más emblemático es el de Nicolás Varrone, quien a sus 25 años se subirá a un Fórmula 2 la próxima temporada, corriendo para Van Amersfoort Racing (VAR). Sin embargo, el propio piloto reconoce que esta oportunidad hubiera sido imposible sin el camino allanado por Franco Colapinto.
Mientras Colapinto ya se prepara para afrontar su tercera temporada en la Fórmula 1 (tras su debut en 2024 y su consolidación en 2025), Varrone desembarca en la F2 con la chapa de ser un especialista en endurance: ya sabe lo que es ganar las 24 Horas de Le Mans (2023) y ser campeón del mundo en LMP3. Y ahora bajará a las fórmulas promocionales para perseguir el sueño del “Gran Circo”, impulsado por la ola que generó su compatriota.
“Creo que se generó una especie de fanatismo en la Argentina por el automovilismo ahora que Franco subió a Fórmula 1, lo que generó mucho interés y hoy toda la gente mira Fórmula 1, toda la gente sigue las carreras“, explicó Varrone en una entrevista con Clarín, analizando la manera en la que el “efecto Colapinto” cambió el escenario comercial y el interés del público local para jugarle un papel vital que reactive su sueño de llegar a La Máxima, algo que había descartado en 2020 por falta de presupuesto.
Pese a que Varrone no es una mera promesa, el joven no duda en justificar que el fervor automovilístico no tardó en trasladarse a las oficinas de marketing, permitiendo que pilotos con talento pero sin billeteras abultadas vuelvan a estar en el radar. “A su vez, eso generó el interés de las empresas para que obviamente haya mucho más apoyo para al menos jóvenes pilotos como yo para incursionar en el mundo de la F1“, detalló, destacando la importancia de este nuevo contexto.
Del endurance a la antesala de la F1
Para Varrone, el regreso a los monoplazas es un giro de timón que ni él mismo esperaba. Su carrera parecía sellada en los autos de turismo y resistencia. “No pensaba ni cerca en poder volver a tener una chance en el camino de la fórmula, por todo lo que significa… El tema del presupuesto y de los sponsors, que siempre en mi carrera fue muy difícil“, confesó.
Sin embargo, su talento al volante terminó pesando más que el dinero. Durante las pruebas con el equipo VAR, su desempeño en pista venció a los competidores que traían consigo valijas más pesadas. “Fue el ingeniero quien mandó los reportes y dijo: ‘Este es el que tienen que elegir’. Quizás no teníamos el presupuesto de otros chicos pero, como digo, mi carrera hasta el día de hoy no fue muy normal“, relató. Ahora, su propia muñeca le brinda la chance de justificar su paso a la élite mundial.
Datos clave
- Nicolás Varrone correrá en la Fórmula 2 con el equipo Van Amersfoort Racing tras destacarse en endurance.
- El “efecto Colapinto” fue clave para reactivar el interés de los sponsors y financiar su regreso a los monoplazas.
- A pesar de tener menos presupuesto que otros candidatos, el ingeniero lo eligió por su desempeño en los tests.
