La carrera de Gorka Giralt como profesional terminó abruptamente en 2022 luego de un fuerte cruce ante Luis Suárez por Copa del Rey. Aquel día, Atlético de Madrid avanzó a los octavos de final por un contundente 5-0 frente al Rayo Majadahonda, de la Primera RFEF en ese entonces.
El Pistolero tuvo la oportunidad de gritar uno de los goles del duelo, pero el arquero vasco fue reemplazado tras solo 50 segundos en el campo. Un pisotón del uruguayo en su mano le provocó una grave lesión que no le permitió continuar atajando no solo en el partido, sino como profesional.
“Sufrí una lesión en la primera jugada del partido. Remata Kondogbia, intento realizar un blocaje, se me escapa. Reacciono bien, pero con la mala fortuna de que Luis intenta finalizar a gol y me pisa la articulación de la mano. Me la estalla en pedazos, como una nuez“, relató Giralt en charla con El Chiringuito.
Y reveló que al instante no notó el daño que había causado la acción: “En ese momento lo primero que hice fue mirar si el balón había salido porque mi idea era desviarla. Después de eso se me empezó a agarrotar. Empecé a perder mucha movilidad. Cuando me quité el guante eso no se movía como un dedo”.
En total, al exarquero tuvieron que realizarle tres intervenciones quirúrgicas para salvarle la mano. La primera solo fue para reconstruirla, tomando huesos de la muñeca y utilizando alambres, tal como explicó el vasco.
A pesar de aquel mal momento que desencadenó su retiro, Giralt, ahora entrenador de arqueros, expresa: “Al ver las imágenes siento que tuve muy mala suerte, pero estuve ahí y decidí tentar a la suerte”.
En aquel 2022, Giral tenía apenas 26 años y una importante carrera en el ascenso español. Supo mostrarse en la Real Sociedad B en el arranque de su carrera para luego pasar Club Portugalete y el Real Oviedo B antes de recalar en Rayo Majadahonda, su último equipo.