Lo que pasó en La Bombonera fue una catástrofe deportiva que no imaginaba ni el más pesimista hincha de Boca. Por primera vez en la historia, el Xeneize quedó eliminado en su propio estadio ante un equipo peruano que, con todo respeto, en nombres propios, historia y presente era menos que Boca.
Pero claro, este Boca está a la deriva hace mucho tiempo. Tiene un entrenador que cambia permanentemente de apellidos y sistemas, que nunca le dio confianza a ninguno de sus dirigidos y ahora paga las consecuencias. Un club con un año larguísimo pero que prácticamente se terminó en febrero.
El Mundial de Clubes puede ser una ilusión, un anhelo, pero los objetivos del club de la Ribera se han desvanecido muy rápidamente. Por segundo consecutivo no va a jugar la Copa Libertadores, pero a diferencia del anterior, tampoco la Copa Sudamericana.
Claro la responsabilidad es de todos: futbolistas, cuerpo técnico y dirigentes. Y en ese tercer grupo todo se resume en Juan Román Riquelme, la persona que dirige absolutamente todo lo que pasa en Boca, sobre todo en el fútbol, y es responsable de todo lo que le ha pasado en el último tiempo.
Han sido cinco los técnicos que han pasado en esta gestión, sin incluir a Fernando Gago, y ninguno ha trabajado con comodidad y todos terminaron yéndose de mala forma de la institución. Muchos de ellos sin hacer declaraciones o como Almirón, renunciando en Río de Janeiro.
¿Qué le queda a Gago? Veremos cuál será la decisión de Riquelme. Pero lo que está claro es que esto es un fracaso rotundo para Boca y el hincha ha pedido “que se vayan todos”. El mensaje es claro.
A partir de ahora, el horizonte le marca al Xeneize que otra vez tiene que jugar en La Bombonera, contra Rosario Central por el Torneo Apertura este viernes. Pero para Boca, lo más importante, que era la Libertadores ya terminó.
Por otro lado, lo de Agustín Marchesín me llama muchísimo la atención. Que el arquero con pasado en la Selección y que fue figura en todos los partidos, incluso contra Alianza Lima. Pero, pedir el cambio para no estar presente en los penales es realmente insólito. Para mí, fue un error groserísimo y temo que quede marcado por esto.
El futbol siempre da revancha y Boca seguramente la tendrá en un futuro, pero lo de ayer terminó como una catástrofe deportiva.
