Casi desde el suelo levantó a San Lorenzo hasta el cielo. Porque ese gol de Sindy Ramírez le dio a su equipo la posibilidad de seguir con chances en la Libertadores femenina que se está jugando en Paraguay. Tras el 1 a 0 aDeportivo Capiatá, este miércoles se viene Nacional, el último rival de la fase de grupos, desde las 19.45.
Sindy está acostumbrada a ser protagonista en momentos importantes. En julio de este año, la ahora defensora central (antes volante polifuncional)nacida en Sauce, Canelones, Uruguay, fue la autora del gol que igualó la final ante Boca, que obligó a la definición por penales y terminó siendo título para San Lorenzo, el tercero de su historia. Y el que le permitió estar jugando la Libertadores.
En el 2015, un año después de iniciar su segunda etapaen el club, también había sido figura en una definición: para el segundo título de Las Santitas en el fútbol femenino nacional, Sindy tuvo que atajar por la lesión de la arquera titular. Se entrenó por una semana y terminó de la mejor manera: San Lorenzo fue campeón con ella en el arco.
“Soy una persona que me gusta aprender y jugar en el lugar en el que me toque o en el que me necesiten. Poder jugar en casi todos los puestos es también aprender en el día a día porque no es sencillo y tampoco lo es transmitirlo en la cancha. Si tengo jugar en todos los puestos trato de rendir al 100% porque soy una persona a la que le gusta aprender”, contó. Ahora se destaca en la defensa pero su paso por varios puestos le dio una gran visión de campo, una gran transición a puestos de ataque y una definición de lujo, no sólo por la calidad sino también por la fuerza de sus disparos.
“Me vine de chica a Argentina y San Lorenzo me abrió las puertas“, contó la uruguaya de 30 años en varias entrevistas. Ella debutó en su país en el 2004, en Sportivo Artigas de Sauce, aunque tuvo paso por varios equipos y hasta celebrando títulos. En el 2009se puso por primera vez la camiseta azulgrana, logrando la clasificación a la primera edición de la Libertadores. Luego volvió a Uruguay pero no se olvidó jamás de su paso por el Ciclón.
Pero no sólo triunfó en el fútbol 11: Ramírez también fue campeona en el futsal del club, porque aún hoy sigue jugando y reparte sus piernas entre ambas pasiones.
Desde Uruguay cuentan que cuando tenía 12 años y ya no podía seguir jugando al baby fútbol fue su padre el que se encargó de armar un equipo femenino para que ella y sus amigas pudieran jugar.“Tuve la oportunidad de disputar un torneo en el Complejo Celeste en el que estaba el técnico de la selección mayor y tuve la oportunidad de que me vieran y que a los 14 años fuera convocada a la mayor directo”, relató. Y claro, también fue jugadora de la selección de su país.
Primera madrina de una peña de San Lorenzo (la de Ciudad Evita), referente fuera de la cancha también participandoen partidos en un complejo penitenciarioy en eventos contra la discriminación y la violencia, Sindy Ramírez busca seguir haciendo historia.