River volvió a demostrar que es uno de los firmes candidatos a quedarse con la Copa de la Liga durante su enfrentamiento ante Gimnasia y Esgrima La Plata y mientras los hinchas deliraban en el Monumental por la goleada, los que lo miraban por televisión sintieron verdadero terror ante una imagen de su figura.

Pese a que Julián Álvarez y Esequiel Barco estaban demostrando ser una gran sociedad, Marcelo Gallardo decidió sacar al primero de estos a falta de trece minutos para el final. Una decisión que habría llegado a causa de un dolor que aquejaba a la Araña para finalizar el partido.

Ante esto, apenas Álvarez se sentó en el banco, el cuerpo médico de River actuó rápido y le vendó la rodilla junto a una gran bolsa de hielo que despertó la incertidumbre del hincha: ¿Qué le pasó al goleador? ¿Se pierde el Superclásico? Todas preguntas que ya tuvieron su respuesta.

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Al parecer, minutos antes de salir, Álvarez tuvo un choque ocasional con uno de los defensores de Gimnasia al disputar la pelota. Este golpe, dejó más dolor del que debía y por eso se le colocó hielo para evitar que la zona se inflamara. De esta manera, no hay ningún tipo de lesión en el delantero que ya piensa en lo que puede ser su último Superclásico.

Vale destacar que, habiendo anotado el segundo de los tres penales que River tuvo a su favor, Julián Álvarez alcanzó a Lucas Alario como el segundo máximo anotador de la era Gallardo con 41 goles. Una marca que seguramente superará y buscará así llegar a los 55 que marcó Rafael Santos Borré antes de partir hacia el Manchester City.