Se cumplen 365 días desde que la Selección Argentina volvió a tocar el cielo con las manos. Tras 28 años sin títulos, de la mano de Lionel Scaloni y todos sus dirigidos, la Albiceleste volvía hace exactamente un año a coronarse de gloria y levantar la Copa América en Brasil ganándole la final a los locales con el gol de Di María.

Los 90 minutos ante el Scratch en el Maracaná no fueron más que el premio a un trabajo que hoy en día sigue por el mismo curso pero que, en su momento, necesitaba de un logro semejante para ser reconocido. Es que bajo las órdenes de Scaloni, se empezó un proyecto que encamina a la Selección Argentina a ser candidata en Qatar 2022 y que ya tiene la Copa América en el bolso desde hace exactamente un año, motivo por el cual este 10 de julio, en conmemoración al por ahora último título argentino en fútbol, fueron varios los que rememoraron lo sucedido y volvieron a festejar.

Uno de ellos fue Rodrigo De Paul , quien sin dudas fue uno de los pilares para la obtención de la Copa y sigue siendo fundamental en el esquema táctico de Scaloni. Desde Madrid y a minutos de comenzar los entrenamientos de pretemporada con el Atlético, el oriundo de Sarandí posteó una serie de historias en su Instagram para recordar el inmortalizado hecho que sucedió en el Maracaná el 10 de julio del 2021.

En concreto, la cuenta “Pibe de Fiorito”, dedicada al fútbol argentino y la Selección Argentina, compartió un posteo dedicado a RDP por su majestuosa actuación en la final ante Brasil con una foto suya levantando la Copa América. El volante central la viodecidió subirla a su storie con una cita suya: “Un 10 de julio”, junto con un emoji de emoción y la bandera nacional fue lo que acompañó a la publicación compartida.

Luego, también hizo lo mismo con otros dos posteos, todos haciendo hincapié a lo que fue aquella noche del 2021 en la que Argentina rompía el maleficio de los 28 años sin títulos oficiales, en donde Rodrigo De Paul tuvo muchísima inferencia para lograr ganar la Copa y volver a conquistar América. ¡Crack, Rodri!