Oscar Ruggeri, campeón del mundo con la Selección Argentina en el Mundial de México en 1986, se sometió al desafío “Elegí uno” que le propuso el youtuber Ezzequiel y en una de sus respuestas dejó claro quién es en su consideración el mejor jugador de la historia del fútbol.

Fue cuando al exdefensor, desde hace años también reconocido por su trabajo en el panel de ESPN F90, fue invitado a elegir entre Lionel Messi y Diego Maradona, los dos mejores jugadores que dijo haber visto en su vida. “Dos genios. Con Maradona jugué 11 años. Maradona”, dijo.

Ruggeri no solo compartió con Maradona la coronación en la Copa del Mundo de 1986, sino que además jugó los Mundiales de 1990, en Italia, y Estados Unidos, en 1994. También con la Selección Argentina, disputaron juntos las Copas América de 1987 y 1989.

A nivel de clubes, coincidieron en Boca para la conquista del Campeonato Metropolitano de 1981, bajo las órdenes de Silvio Marzolini, en una apasionante definición con Ferrocarril Oeste, que terminó apenas un punto por debajo en la clasificación general.

Maradona y Ruggeri, dos líderes naturales en la Selección Argentina.

Recuerdo inolvidable del Mundial 1986

Diego Armando Maradona fue el gran líder de la Selección Argentina para la conquista del Mundial de México en 1986, con actuaciones memorables como ante Inglaterra y Bélgica, además de un envidiable registro de cinco goles y cinco asistencias que lo hicieron, indiscutiblemente, el mejor de aquel certamen.

Pero más allá de las reiteradas valoraciones de aquella actuación, Oscar Ruggeri recordó no hace mucho tiempo la importancia que tenía el 10 y capitán en el vestuario, especialmente a la hora de motivar a los demás.

“Hace 40 años, nosotros teníamos un entrenador que nos laburaba todos los días de la semana, en todos los detalles. Y después teníamos entre nosotros, que venía Maradona, el mejor jugador del mundo, te miraba y te decía ‘sabés que vos sos el mejor, ¿no?’. ¿Cómo me va a pasar el 9? Te agarraba este tipo y te gritaba ‘dale que vos sos el mejor’. A mí me agarraban unas ganas de matar”, relató.