En mayo de 1999 Yevgeny Kafelnikov trepó hasta la cima del ranking del ATP y se convirtió en el primer ruso en ser número 1 del mundo, pero un puñado de años después sorprendió al mundo al retirarse de la actividad y alejarse del tenis en medio de cuestionamientos por un escándalo de apuestas ilegales.
Años después, volvió a pararse frente a los micrófonos para criticar al Big Three integrado por Novak Djokovic, Roger Federer y Rafa Nadal, después de haber ganado casi 25 millones de dólares en premios y tras haber probado suerte en el póker y el golf.
La irrupción de Kafelnikov
Fue en 1992 que Kafelnikov se convirtió en jugador profesional y en ese entonces nadie sospechaba que podía meterse en una disputa de un ranking que parecía que sería liderado durante un largo tiempo por el estadounidense Pete Sampras. Sobre todo porque hasta entonces ningún ruso había llegado tan alto y los norteamericanos contaban con una escuela exitosa en la materia.
Pero, de a poco el nacido en Sochi fue ganándose espacio. Incluso, la barrera el top 100 la cruzó recién dos años después, a los 20 años, cuando alcanzó la final del Masters de Hamburgo tras eliminar al alemán Michael Stich y al croata Goran Ivanisevic, entre otros, para saltar hasta el puesto 11 del ranking mundial.
Pero, el gran golpe lo dio en 1996, al ganar Roland Garros y transformarse en el primer ruso en conquistar un Gran Slam. En ese certamen barrió en tres sets a Pete Sampras en semis y en la final nuevamente a Stich, también en sets corridos. Allí, recibió el mote de Kalashnikov, por su potente golpe.
Ese triunfo, se lo dedicó a quien por entones era su entrenador, Anatoly Lepeshin: “Me enseñó cómo competir, cómo comportarme dentro de la cancha y cómo ser un buen profesional. Desde las 6 de la mañana que me despertaba ya estaba cuidándome, haciéndome tortitas de jamón y queso, esa es nuestra historia”, contó en 2019 al ser incluido al Salón de la Fama.
Kafelnikov, número 1 del mundo y polémicas
Después de ese triunfo, siguieron los logros y en 1999 se alzó con el Abierto de Australia y llegó hasta las semifinales del US Open. Pero, su fama estalló en la ex Unión Soviética cuando en el año 2000 se quedó con el oro en los Juegos Olímpicos de Sídney tras superar a uno de sus grandes grandes rival, el brasileño Guga Kuerten.
“Ríos, Guga, Moyà, Pete (Sampras) y Andre (Agassi) estaban dominando el Tour en ese momento”, declaró tiempo después Kafelnikov en diálogo con el portal de la ATP. “Para mí, todas fueron grandes rivalidades. Jugué muchos partidos geniales contra Guga”.
También sumó triunfos en dobles, en donde se alzó con tres Roland Garros (1996, 1997 y 2002) y el US Open 1997. Además, conquistó la Copa Davis para Rusia en 2002. Y su fama llegó al punto tal que su figura ingresó al Virtual Tennis, el popular juego de tenis que arrasó con el mercado a comienzos de milenio y que solo tenía a 8 profesionales (7 en la versión PC).
Pero, cuanto mayor fue su éxito, mayores flaquezas empezó a mostrar y el alcohol se convirtió en un problema para su vida y su carrera. Es así que después de su retiro confesó haber jugado partidos con resaca.
Un retiro sin anuncio y el escándalo de apuestas
Kafelnikov empezó a ausentarse de varios torneos por lesiones y bajo nivel y el 31 de enero de 2004, a tres meses de su último partido, su compatriota Marat Safin se sentó en una conferencia de prensa durante el Abierto de Australia para anunciar lo que se preveía: “Señores, Yevgeny se fue”.
El tenista ruso, que para entonces pesaba 105 kilos, había prometido dejar la actividad cuando no lograra clasificar a los cuatro Grand Slam. Y así fue. De un día para el otro y sin hablar con la prensa, abandonó las canchas para siempre con apenas 29 años.
Muchos años después, en 2016, el portal inglés The Telegraph reveló que Kafelnikov estaba siendo investigado por la propia ATP por un escándalo de arreglo de partidos vinculado a apuestas ilegales. Justamente, según informó el sitio inglés, su nombre fue reemplazado por “Jugador B”, en un informe del organismo difundido en 2005.
El encuentro bajo sospecha fue su derrota ante el español Fernando Vicente en la primera ronda de Lyon. “Kafelnikov jugó su último partido de tenis profesional quince días después, poco después de recibir una carta en la que se indicaba que la ATP estaba llevando a cabo una ‘investigación de delito grave’ en el partido de Lyon”, informó The Telegraph.
Consultado sobre el asunto, el ex tenista negó haber recibido información sobre algún tipo de investigación, pero no descartó que existiese: “Quizás sí, quizás no”. Lo que sí desmintió es haberse retirado por ese motivo.
Kafelnikov incursionó en nuevos deportes y criticó al Big Three
Tras su despedida, al año siguiente se lo vio participando de grandes torneos de póker internacionales y, años después, también incursionó en el golf, siendo parte del Russia Open del PGA European Tour 2008.
Por otra parte, entrenó a Marat Safín durante un tiempo, pero nunca se sintió cómodo en el ambiente del tenis. Incluso, cuando Roger Federer, Rafael Nadl y Novak Djokovic pasaron a dominar la escena, apuntó contra ellos.
“Son muy aburridos, tienen las mismas rutinas totalmente automatizadas, no generan historias curiosas en la pista y fuera de ellas. El que más me aburre es Roger, se nota que es suizo y siempre ha dispuesto de todo lo que ha necesitado”, disparó en 2018 al portal TennisWorldUSA. Por otro lado, a la hora de elegir al mejor de los tres, no dudó en quedarse con Djokovic: “No necesita demostrarle a nadie que es mejor que Federer y Nadal, eso es seguro”.
Este año, también se indignó sobre los polémicos casos de dopajes de Jack Sinner e Iga Swiatek: “Debería haber una sanción para toda la vida para las personas que dan positivo. No hay excusas, cero tolerancia sin importar quién seas”. Sobre ese punto, polemizó: “A veces me pregunto, ¿por qué demonios no utilicé esteroides durante toda mi carrera? Hubiera podido jugar 300 partidos en vez de 170 cada año. Es una verdadera vergüenza lo que está pasando hoy en día en el mundo del tenis”.