Hace algunas semanas, varios de los mejores jugadores y jugadoras de tenis de la actualidad hicieron público un reclamo en el que exigían a la ATP, la WTA, la ITF y los Grand Slams que aumenten el dinero de los premios. Se utilizó como argumento que otros deportes reparten más equitativamente el dinero, como por ejemplo el básquet que da aproximadamente un 50% de lo recaudado, mientras que el porcentaje en el tenis ni siquiera llega al 20%.

Fueron varios los tenistas que alzaron la voz a favor del reclamo y, hasta el momento, no se conocían deportistas que estén en contra, hasta que llegó un posteo en las redes sociales de Andrea Petcovic, la ex tenista alemana que llegó a ser número 9 en el ranking de la WTA, obtuvo siete títulos y fue semifinalista de Roland Garros en 2014. En 2022 decidió retirarse de la actividad profesional, pero continuó vinculada al tenis, de hecho, en la última Laver Cup fue la presentadora del evento. Un detalle no menor es que Petcovic se graduó en la carrera universitaria Ciencias Políticas mientras competía profesionalmente.

Borg, Petcovic y McEnroe. (Foto: Getty).

La reflexión de Petcovic respecto al dinero en premios

La alemana afirmó en sus redes sociales: “El aumento de los premios en metálico tiene su lado negativo. Mientras que al principio de mi carrera aún compartíamos entrenador y viajábamos en manada con otras jugadoras, dormíamos tres en la habitación para ahorrar dinero, robábamos jamón y queso de los buffets de desayuno y formábamos amistades para toda la vida, el aumento del tamaño de los equipos también ha incrementado la soledad en los circuitos”.

Además, agregó: “Las personas a las que pagas no son tus amigos. Repito: la gente a la que pagas no son tus amigos. Puede parecerlo y puede que acabéis siendo amigos, pero mientras haya una dinámica de poder salarial en juego no hay igualdad y una amistad no es una amistad de verdad a menos que haya igualdad”.

Cuando los jugadores viajan con fisioterapeutas, entrenadores, psicólogos y preparadores físicos, están rodeados de personas a las que pagan y que ocupan el espacio de una posible amistad real. Una amistad en la que tu amigo no tenga que preocuparse por perder su trabajo si te dice que esa falda te queda fatal”, sentenció Petcovic.

Petcovic dejó el tenis profesional en 2022. (Foto: Getty).

¿Dónde está el gran cambio?

Petcovic especificó dónde nota un gran cambio en los últimos años: “El mayor avance en el tenis ha sido probablemente la profundidad de la calidad. En mis primeros 5 ó 6 años en el circuito, solía ser capaz de ganar al menos dos rondas en los grandes torneos aunque estuviera lejos de mi mejor nivel. Era duro y estaba en forma, y en la mayoría de los partidos eso bastaba. Con los años, sin embargo, las cosas cambiaron radicalmente, sobre todo en el lado femenino. Los premios en metálico aumentaron y con ellos la profesionalidad”.

No se puede comprar talento, pero sí buenos entrenadores y preparadores físicos, y uno puede permitirse volar en primera clase y alojarse en mejores hoteles, lo que a su vez ayuda a superar antes el jet lag y a descansar mejor el cuerpo. Puede que sigamos viendo partidos malos, pero los partidos malos de 2025 son mejores que los de 2011. Al menos, son más rápidos y están mejor entrenados”, concluyó Petcovic.