El circuito de la ATP se prepara para el regreso de Jannik Sinner a las canchas. El número 1 del mundo estuvo tres meses fuera luego de llegar a un acuerdo con la AMA -Agencia Mundial Antidopaje- y si bien se perdió algunos torneos importantes, dirá presente en el Masters 1000 de Roma y también en Roland Garros. Sus inmediatos perseguidores en el ranking -Alexander Zverev y Carlos Alcaraz– no supieron aprovechar sus oportunidades y el de San Cándido se mantuvo en lo más alto.
En marzo de 2024, Sinner se realizó un control antidoping y dio positivo de clostebol en una ínfima dosis. El italiano logró demostrar que eso no ayudó a su desempeño, pero lo curioso es que recién se dio a conocer en agosto, luego de los Juegos Olímpicos.
Muchos integrantes del circuito se mostraron a favor del de San Cándido y otros en contra, no tanto contra él, sino más bien con la ATP, la ITF y la AMA ya que en otros casos se suspendió al jugador y se le impidió seguir compitiendo, pero en este caso no fue así. En abril de 2025 se iba a celebrar un juicio, pero en febrero hubo acuerdo entre el italiano y la AMA y se estableció que sea suspendido nada más que por tres meses, lo que generó malestar en líneas generales.
Sinner y el trato de sus compañeros
El italiano dialogó en conferencia de prensa antes de su presentación en el Masters 1000 de Roma y se refirió al comportamiento de sus compañeros tras la sanción: “El tenis es un deporte individual y cada uno juega por sí mismo. Pero al inicio de la sanción me refugié en mi equipo y en mis amigos. Aunque recibí mensajes que me sorprendieron de algunos jugadores, de otros no recibí nada, pero es normal. Cada uno quiere ganar y ahora quiero ir paso a paso y ya me encontraré con ellos en la cancha”.
Por otro lado, reveló cómo lidió con llegar a un acuerdo con la AMA: “Personalmente, estoy muy feliz de que la sanción no haya coincidido con ningún Grand Slam. Al principio, no quería llegar a un acuerdo, pero era jugárselo al todo o nada. No fue fácil de aceptar el acuerdo, porque sé lo que pasó, pero a veces tienes que aceptar lo mejor en el peor momento posible. Y estoy muy feliz de que haya terminado”.
¿Cómo lidia con el cariño de los fanáticos italianos?
No caben dudas que Jannik Sinner es una verdadera estrella en Italia y así lo vive a sus 23 años: “No sé de dónde viene esta locura. Solo soy un chico de 23 años y que juego al tenis. Pero para mi no cambia nada, acepto las cosas como vienen. Simplemente, me gusta jugar al tenis y el éxito no me puede cambiar. Siempre recuerdo que vengo de un pueblo de 2.000 personas y volver aquí a Roma delante de tantas personas es increíble”.
Roland Garros, su gran objetivo
“El objetivo principal es París. Estas semanas me servirán para ver que tenis estoy jugando, no estoy aquí para vencer a todos, estoy aquí para probarme. Cada partido es difícil y siempre es complicado el inicio de un nuevo torneo. Tengo que meterme en la cabeza que es un rival al día, pero estoy tranquilo y bien físicamente y mentalmente también estoy recuperado”, concluyó el de San Cándido.
