Mientras la Primera de Boca perdió con un flojo nivel colectivo que invita a la reflexión, la Reserva sigue firme. El equipo de Hugo Ibarra y Mauricio Serna volvió a ganar: esta vez fue un triunfo agónico ante Vélez como visitante, por 2-1.
La jornada fue complicada para el Xeneize, que se encontró con un duro rival que impuso sus condiciones en la primera parte. Y por eso los goles llegaron recién en el complemento: a los 16 minutos, Exequiel Zeballos armó una jugada personal y sacó un derechazo inatajable para abrir la cuenta.
Parecía que todo se encaminaba al 1-0 pero apareció Mateo Pellegrino. El hijo de Mauricio fabricó un penal (inobjetable falta de Alan Varela) a los 42 minutos del segundo tiempo y luego fue el encargado de cambiarlo por gol para ponerle suspenso al final del encuentro.
Por fortuna para Boca, hubo tiempo para más. Luca Langoni armó una jugada espectacular por la banda derecha y tiró el centro atrás. Allí estaba Zeballos, quien se tomó su tiempo para poner el segundo y desatar el festejo de toda la Reserva azul y oro.
Como Estudiantes perdió en su visita ante Colón, ahora el Xeneize quedó como puntero de la tabla con 36 puntos (los mismos que el Pincha pero con un partido menos). De esta manera, el equipo de Ibarra y Serna se perfila como uno de los grandes candidatos a quedarse con el título.