Sin lugar a dudas, el momento en donde más en peligro estuvo la continuidad de Boca en la CONMEBOL Libertadores fue desde la expulsión de Marcos Rojo. El capitán vio la segunda amarilla tras dos infracciones fuertes y dejó al equipo con 10 con gran parte del segundo tiempo por delante. Por suerte para él, el Xeneize se metió en la final igual.

Tras el partido, el zaguero habló con muchas sensaciones encontradas. Por un lado, la alegría de haberse metido en la final; por el otro, la bronca de saber que tendrá que verla desde afuera. Cuando le tocó pasar por los micrófonos, el ex-Manchester fue muy autocrítico.

“Desde el momento de la expulsión sufrí mucho porque estábamos sufriendo. Era obvio que se iban a venir y dejar al equipo con uno menos fue muy irresponsable. Me dolió mucho”, expresó Rojo, que agregó: “Lo único que tengo son palabras de agradecimiento a todos mis compañeros por el esfuerzo que hicieron, por dejar todo y por conseguir la clasificación que era lo que veníamos a buscar”.

“Ahora , un poco más frío, pensar que me pierdo la final, que tanto deseaba jugarla… Pero bueno, toca desde afuera apoyar y con mucha fe porque tenemos un equipo de hombres que van al frente en todos lados, hoy lo demostramos acá en una cancha muy difícil”, expresó el zaguero.

Y cerró: “Hicimos un gran partido. Ahora a recuperar, a pasar el tiempo y a apoyar a mis compañeros desde afuera en la final”.

¿Cuándo se juega la final de la Copa Libertadores?

Boca y Fluminense se enfrentarán el próximo sábado 4 de noviembre en el Maracaná, aún con horario a confirmar.