Luego de una semana llena de emociones, Estudiantes viajó a Liniers en busca de darle continuidad a su paso arrollador en el inicio de laCopa de la Liga Profesional. Del otro lado, Vélez no ganaba desde la primera jornada y estaba con la pólvora mojada, por lo que un triunfo era revitalizante. Promesa de buen partido para despedir la jornada dominical.
Para el cotejo que cerró el domingo en la Copa LPF, el “Ruso” Zielinski decidió guardar a la mayoría de los futbolistas que formaron parte del emotivo 2 a 0 al Audax Chileno, que tuvo lugar entre semana por Copa Libertadores, y el DT se decantó por una formación alternativa, dejando en el banco a figuras de la talla de Mauro Boselli, Leandro Díaz yFernando Zuqui. El Fortín se aprovechó de la falta de rodaje del equipo “suplente” y generó una gran cantidad de chances, que injustamente no se trasladó en el tanteador durante la etapa inicial.
El primer gol del encuentro tuvo lugar cerca del cuarto de hora y con una curiosa maniobra. La pelota se había marchado de los límites del campo de juego y era lateral para el Fortín; mientras el Pincha se ordenaba en el fondo, Emmanuel Más devolvió rápidamente el balón y, tras el saque de manos, llegó el centro llovido hacia el segundo palo y Lucas Janson se encargó de mandarla al fondo de la red para abrir el marcador. Si lo hubiera visto el Doctor…
Con el ingreso de los habituales titulares, Estudiantes comenzó a crecer en volumen de juego y dominó tanto la posesión como las chances de gol durante casi toda la segunda etapa. De tanto insistir, el cero se rompió para el León: Díaz sigue con una racha goleadora de ensueño y encontró el empate cuando quedaban tan solo dos minutos para el pitazo final. Un justo marcador.
