El Superclásico ya es un hecho y el mismo terminó con una victoria agónica de River con un polémico penal que Miguel Borja ejecutó de gran manera y evitó que Boca se lleve un punto del Monumental. Sin embargo, el final del encuentro no se marcó solo ahí, sino que todo terminó en un escándalo donde se dio una tángana que tuvo como involucrados a todos los futbolistas y cuerpo técnico de ambos equipos.

El detonante se desconoció en un principio, pero a medida que fueron pasando los minutos tras el final del Superclásico se vio que el motivo que fue el puntapié de los tumultos se dio debido a un gesto que hizo Agustín Palavecino hacia los jugadores de Boca en el festejo del gol de penal que marcó el triunfo para River.

En concreto, lo que pudo verse en un video que no fue revelado hasta el final del encuentro fue al ex Platense gritándole el gol en la cara a todos los futbolistas de Boca y sobre todo a Sergio Romero, quien reaccionó y le dijo de todo, para que luego se sumen todos los demás futbolistas y se desemboque la tángana.



Luego, el arquero de Boca esbozó que a Palavecino le dijo que lo suyo fue una falta de respeto y que debía ir a celebrar con sus compañeros en lugar de provocar al rival, pero el envión de Chiquito fue suficiente como para que todo el plantel xeneize despotrique contra los de River.

Finalmente, todo terminó en tres expulsiones por equipo y fue la conclusión final de un partido que se le desbordó por completo al árbitro Darío Herrera, de polémico arbitraje y uno de los grandes responsables de la calentura, fricción e interrupción del Superclásico.