Valentín Barco provoca su polémica propia. Su personalidad atrevida genera controversia, sobre todo en los hinchas de River, al tiempo que los de Boca no lo terminan de abrazar por su salida al fútbol europeo. Pero lo cierto es que a donde va, trasciende y en general por aspectos extrafutbolísticos.
En su aparición en el Xeneize, se consolidó como una de las revelaciones en un equipo sin demasiado vuelo futbolístico, dando pasos agigantados hasta instalarse como una joya argentina. Pero por su estilo y sus declaraciones, siempre fue muy mediático.
Desde que llegó a Europa, le costó un montón adaptarse, algo que el propio Riquelme había anticipado cuando Barco se marchó: “Es un jugador con mucha técnica, un atorrante, pero para mí no sabemos si es volante o lateral”, había dicho Román.
Primero desembarcó en el Brighton de la Premier League, a donde llegó sin siquiera afirmarse en una posición específica. Un club conocido como “de reserva” porque busca potenciar jugadores jóvenes de Sudamérica para luego venderlos a gigantes de Europa.
Su debut fue complicado ante Liverpool y a finales de abril de ese año le tocó chocar ante Manchester City en donde su equipo fue goleado y él quedó en la foto de algunos tantos, pese a que el DT lo defendió en ese momento. En ese contexto, sumó 318 minutos en el cuadro inglés en apenas dos temporadas y en sus 7 partidos en cancha sufrió 6 derrotas. Todas pálidas.
Desde allí, se fue a Sevilla, en donde recaló con el objetivo de ser la variante de Marcos Acuña. Pero allí su situación empeoró porque apenas jugó 2 encuentros sobre 16 posibles, cinco de los cuales, ni siquiera fue convocado. Todo esto en un contexto en el que el DT aducía no tener tiempo para “mejorar” a la joven promesa.
El que sí se tomó ese trabajo es el entrenador de Racing de Strasburgo, a donde aterrizó Barco esta temporada. El club francés está invirtiendo fuerte en juveniles, a punto tal de que el promedio de edad de su plantel no supera los 24 años. Aquí, además, lo utilizan como mediocampista central.
El Colo está así aprendiendo también a defender, a que en los últimos partidos fue el futbolista con más recuperaciones de su equipo. Algo que antes se le achacaba.
Esto expone un crecimiento del joven que ahora se encuentra en un club en donde es valorado por la afición, el plantel y su técnico, quien lo levanta en andas para felicitarlo. Un ambiente agradable en donde madura y puede mostrar todo su repertorio.
En este marco, un futuro de Valentín Barco en la Selección Argentina se vuelve probable. La Albiceleste necesita laterales izquierdos y más allá de las necesidades, Barco tiene un talento increíble que no se puede ignorar.
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