La ida de los cuartos de final de la Concachampions dejó todas las llaves abiertas, a excepción de la de Atlanta United ante Philadelphia Union. La franquicia de Pensilvania se impuso en condición de visitante 3-0, por lo que realmente había pocas expectativas para los dirigidos por Gabriel Heinze de dar vuelta la serie. 

El entrenador argentino sabía de antemano que no podían repetir los errores del encuentro disputado en el Mercedes-Benz Stadium, donde los suyos se encontraron mal parados en cada una de las contras perfectamente ejecutadas por los de Jim Curtin. Ese espacio regalado era un riesgo que no debían volver a tomar. 

A diferencia de lo que se podía pensar en un principio, el conjunto local fue el que comenzó dominando en el partido de vuelta. En el Subaru Park, los locales manejaron el balón y tuvieron situaciones claras para ampliar la diferencia global. Sin embargo, Philadelphia no logró convertir y lo pagó caro. 

Atlanta United comenzó a empujar al final del primer tiempo sin muchas ideas y, a diferencia del primer partido donde fue superior en los 45’ minutos y parecía que les faltaba suerte, en esta ocasión les alcanzó para descontar. El autor de gol fue Santiago Sosa, quien sorprendió, apareció como extremo y le dio vida a la llave. 

Atlanta United intentó de todas maneras en el segundo tiempo, pero poco pudo hacer para igualar una serie que terminó de liquidarse con un gol de contraataque de Kacper Przybyłko. Con el 1-1 final, Philadelphia Union se convirtió oficialmente en el primer equipo clasificado a las semifinales de la Concacaf Liga de Campeones y ahora esperará por el equipo que resulte ganador entre América y Portland Timbers.