Adalid Maganda, silbante despedido recientemente por la Comisión de Arbitraje del futbol mexicano, confirmó que el 15 de marzo realizará una manifestación en las instalaciones de la Federación Mexicana de Futbol y no se retirará hasta no ser atendido su reclamo. ¿Su objetivo?, la salida de Arturo Brizio.

El discutido ex árbitro de la Liga MX llevó a cabo una protesta en el Zócalo de la Ciudad de México acompañado de su abogado, su madre, otros colegas y Rey David Cisneros, el presidente de la Asociación de Afrodescendientes Yanga. Allí confirmó públicamente que buscará que el mandamás del arbitraje quede fuera de su puesto.

“El 15 de marzo haremos un plantón permanente a las afueras de la Federación Mexicana de Futbol, allá en Toluca, para ver si así nos hacen caso. Vienen muchas personas en apoyo de diferentes partes de la República y les hago un llamado a todas las personas que quieran unirse a la causa a presentarse, afirmó.

Y añadió:Pretendemos recuperar mi empleo, que me costó mucho tiempo conseguirlo, y que se vaya Brizio; regresaré al arbitraje, siempre y cuando, el racista de Brizio ya no esté ahí. Si ya no me quieren ahí, deben indemnizarme conforme a la ley”, añadió el acapulqueño.

Maganda volvió a sostener su postura de haber sido despedido de la Comisión de Arbitraje producto del racismo que ha empleado hacia él Arturo Brizio, quien había argumentado la salida por las malas actuaciones:  “No conozco un árbitro perfecto en el mundo, sin fallas. Sabemos que es racismo y no es del gusto de Brizio” añadió su representante legal, Proceso González Calleja.

Por su parte, el árbitro recordó que hace dos años fue intimado por sus acusaciones al presidente de la Comisión de Arbitraje respecto de gritos discriminatorios: "me levantaron unos judiciales y me golpearon".

“Estoy levantando una acta ante un notario: si algo me llegara a pasar a partir de hoy, que se vaya todo el peso de la ley de la Federación y de Arturo Brizio”, disparó el silbante.