Muy diferentes son las realidades de Libertad y Boca, clubes que se verán las caras el 17 de septiembre en Asunción en lo que será el primer partido de ambos por Copa Libertadores desde la vuelta al fútbol.

Pasa que el conjunto argentino ni volvió a los entrenamientos, ya que en su país la cuarentena sigue vigente y los protocolos no fueron aprobados para que puedan pisar otra vez una cancha.

Mientras tanto, los dirigidos por Ramón Díaz en cierto punto "sacan ventaja", ya que hace más de un mes que están trabajando juntos y ahora volvió el torneo local.

Punteros, perdieron el primer partido y ganaron el segundo pero con lo justo, y el nivel de juego del equipo es bastante bajo comparado a lo que venían mostrando.

Pero sobre eso habló el DT:  "Todos los equipos están teniendo dificultades. A medida que vayan pasando los partidos, vamos a ir jugando mejor. Tengamos en cuenta que hubo un parate de cuatro meses. No pretendamos, el periodismo y la gente, que los equipos tengan la dinámica y el ritmo que tenían cuando paramos. Hay que esperar un poquito para ver el fútbol que todos queremos", avisó.

Luego, agregó: "El equipo está volviendo a tener identidad, ritmo. Tenemos que mejorar un montón porque para estar y mantenernos en la punta tenemos que jugar en un cierto nivel. Debemos mejorar, pero que la gente no se olvide de que vamos primeros".