Tigres UANL tuvo un gran año en 2015 llegando a la Final de la Copa Libertadores siendo el mejor equipo de la competición. Sin embargo, no pudo sacarle ventaja a River en El Volcán y su sueño se derrumbó en el estadio Monumental la noche del 5 de agosto al caer por 3-0, por lo que el cambio de la localía pesó mucho en la definición del título.
Antonio Briseño, por entonces defensor de los Universitarios, le brindó una entrevista a Ignacio Rivarola a través de un directo de Instagram y hablaron sobre aquel polémico encuentro. El jugador no se guardó nada y confesó que sintieron que el trabajo del silbante dejó mucho que desear.
El periodista le recordó la patada de Lucas Alario a Guido Pizarro (con el partido 0-0), en la cual el árbitro decidió mostrarle la tarjeta amarilla y Antonio Briseño explotó: “Esa. Nosotros supimos que el arbitraje no era normal cuando te pegan esa patada y te inclinan la cancha así”.
“No porque él tenga algo a favor de alguien, es por la presión del estadio (Monumental). Tú marcas una falta y nadie dice nada, pero si es en contra te putean y te va aquí (a la cabeza). Influye mucho terminar de local. Cuando le meten la patada dijimos: ´vamos´”, admitió el Pollo.
Por último reveló en qué momento los Felinos se vieron sin oportunidad de cumplir la hazaña: “Creo que el (gol) que nos mató fue el de Funes Mori (3-0), porque nosotros veníamos mucho de atrás, Tigres nunca se daba por vencido. Recuperábamos, remontábamos. Siempre fuimos un equipo con mucha resiliencia, pero cuando nos metieron el 3-0 no había chances”.
